Santander sigue el pulso nacional del déficit habitacional: menos hogares en necesidad, pero crece la urgencia de vivienda nueva
Aunque el déficit nacional bajó a 26,8 %, el déficit cuantitativo subió y en Santander la construcción está en caída: solo 580 viviendas iniciadas en el primer trimestre de 2025. Sin más subsidios públicos y sin impulso real a la vivienda rural, la recuperación será una ilusión.

Aunque en Colombia el déficit habitacional cayó al 26,8 % en 2024, el déficit cuantitativo —hogares en peligro real por falta de vivienda adecuada— volvió a aumentar. En Santander, donde el sector ya está en rojo con caídas en construcción y ventas de vivienda, el desafío para garantizar techo digno es doble.
La reducción nacional del déficit habitacional del 28,9 % al 26,8 % entre 2023 y 2024 responde principalmente a mejoras en la calidad de vivienda —menos hacinamiento, mejores materiales y servicios— con un descenso del déficit cualitativo del 22,1 % al 20 %. Sin embargo, el déficit cuantitativo aumentó ligeramente, llegando al 6,81 %, lo que significa que 41 000 hogares quedaron sin una vivienda adecuada.
En Santander, las señales también reinventan una realidad preocupante. Según Camacol, las lanzamientos e iniciaciones de vivienda en la región cayeron dramáticamente: solo se realizaron 580 unidades en el primer trimestre de 2025, frente a más de 1.300 en el mismo periodo de 2023. Las ventas también descendieron un 20 %
Esta brecha local se explica por la escasa ejecución de la política pública en vivienda social. A nivel nacional, Camacol advierte que en 2025 sólo habrá unos 20 000 subsidios —menos de la mitad del programa Mi Casa Ya— y que solo se entregaron 25 992 mejoramientos en 2024, con una ejecución de apenas el 6,5 %. La situación en Santander refleja una inversión pública insuficiente frente a la demanda creciente.
Según documentos históricos de la Gobernación de Santander, en años anteriores el déficit habitacional cualitativo estaba por debajo de la media nacional, pero seguían cerca de 160 000 hogares sin condiciones dignas.
Experto local del sector señala que “la caída del déficit cualitativo se explica más por esfuerzos domésticos y entregas de vivienda terminada, no por políticas públicas sistemáticas. El déficit cuantitativo, en cambio, refleja un problema estructural sin respuestas reales”. Además, suma: “Si no se reactiva la construcción y mejoran recursos para vivienda rural, sectores vulnerables quedarán excluidos”.