¿“Por amor a Santander”? La candidatura de Lina Barrera revive quien está detrás y papel petrista en ENTerritorio
Entre inversiones millonarias y silencios convenientes, la candidatura de Lina Barrera plantea si realmente representa a Santander... o a otros intereses que nunca se fueron.

Lina María Barrera, exdirectora de ENTerritorio y candidata conservadora detrás del eslogan “POR AMOR A SANTANDER”, intenta nuevamente una curul en la Cámara. Su candidatura suscita interrogantes sobre su historial al servicio de intereses familiares y el silencio frente a controversias que afectan al departamento.
Barrera asumió la presidencia de ENTerritorio en noviembre de 2021 durante el gobierno de Iván Duque —una posición clave para la ejecución de proyectos regionales clave— y logró mantenerse en el cargo hasta marzo de 2025, incluso tras el cambio de gobierno con Gustavo Petro. Su hoja de vida incluye dos periodos como representante a la Cámara por Santander (2010–2014 y 2014–2018) y un breve paso por el viceministerio del Deporte.
Aun así, al despedirse dijo que su salida respondía a motivos “netamente personales” y la apertura de nuevos retos en su vida pública.
Lo que subyace es una historia que trasciende su propia trayectoria: Barrera fue esposa del condenado excongresista Iván Díaz Mateus, protagonista del escándalo de la ‘Yidispolítica’. A pesar de eso, logró mantenerse activa en cargos de alto perfil en distintos gobiernos, lo que despierta inquietudes sobre la persistencia de redes de poder familiar más que el mérito técnico o el servicio regional.
Ahora, bajo el lema “POR AMOR A SANTANDER”, Barrera busca regresar al Congreso. Pero ¿puede este amor ocultar vínculos oscuros con el pasado político del departamento? La pregunta cobra fuerza cuando se le recuerda mantuvo silencio ante los cuestionamientos éticos que persisten alrededor de su entorno político. Esta historia apenas comienza y será la campaña la que aflorara su pasado letrista en el país y sus intereses personales por encimas de los del departamento.