Pico y placa metropolitano regresa en octubre: la comunidad celebra
El Consejo de Estado revivió el pico y placa metropolitano en Santander y dejó en ridículo al agitador Leonardo Silva Parada, quien se quedó sin argumentos tras vender humo con sus demandas.
El Área Metropolitana de Bucaramanga recupera una de sus principales herramientas de control vial. A partir del 1 de octubre, Girón, Piedecuesta y Floridablanca volverán a aplicar la medida de pico y placa metropolitano, bajo el mismo modelo que ya rige en Bucaramanga: dos dígitos diarios, de lunes a viernes entre las 6:00 a.m. y 8:00 p.m., y los sábados de 9:00 a.m. a 1:00 p.m.
La decisión fue adoptada el pasado 17 de septiembre en el despacho del alcalde de Floridablanca, José Fernando Sánchez Carvajal, con la participación de las autoridades de tránsito de los cuatro municipios. Allí se dejó en firme que, tras el reciente fallo del Consejo de Estado que revocó al Tribunal de Santander, la medida regresa y se mantiene mientras se realizan estudios técnicos sobre movilidad, accidentalidad y medio ambiente.
El show de Leonardo Silva Parada quedó en nada
El regreso del pico y placa deja en evidencia el fracaso del agitador Leonardo Silva Parada, quien había montado una de sus acostumbradas escenas de protesta y demandas contra la medida. El Tribunal en primera instancia le dio la razón, pero finalmente el Consejo de Estado desmontó sus argumentos y restituyó la norma.
Hoy, con el fallo en firme, la comunidad ve cómo aquel “triunfo” del payasito Parada no fue más que un chispero: ruido y espectáculo para las cámaras, sin resultados concretos que beneficien a nadie.
Lo que viene para los conductores
La resolución establece que los días y dígitos serán los siguientes:
- Lunes: placas terminadas en 3 y 4
- Martes: 5 y 6
- Miércoles: 7 y 8
- Jueves: 9 y 0
- Viernes: 1 y 2
Los sábados, la restricción irá rotando semana a semana entre los distintos dígitos, comenzando el 4 de octubre con las placas terminadas en 9 y 0.
Quien incumpla la medida enfrentará multas equivalentes a 15 salarios mínimos diarios vigentes, es decir, unos $711.000, además de la inmovilización del vehículo.
La diferencia entre comunidad y politiqueros
Mientras la comunidad pedía soluciones reales al caos vehicular, lo que recibieron por meses fueron shows mediáticos y discursos vacíos. El regreso del pico y placa confirma que la ciudad necesita medidas serias y sostenidas, no la politiquería barata de personajes como Leonardo Silva Parada, que buscan protagonismo personal sin aportar al ordenamiento del área metropolitana.