Joven santandereana asesinada en su vivienda sacude la región: ¿nuevo episodio de sicariato impune?
Una joven madre fue asesinada a tiros en su casa en Santander, mientras la violencia sicarial afecta cada vez más zonas residenciales. ¿Qué hace falta para frenar este horror?
Un ataque sicarial que terminó con la vida de una joven madre en Santander revive la alarma por la escalada de violencia: esta vez, los sicarios irrumpieron en su casa y la mataron sin mediar palabra. ¿Qué pasa con la seguridad en la región?
Una joven madre fue asesinada dentro de su propia vivienda en Santander, en un nuevo episodio de sicariato que ha conmocionado a la comunidad. Según el medio Lo Que Pasa en Colombia, hombres armados llegaron hasta el inmueble y le dispararon en reiteradas ocasiones, provocando su muerte inmediata la madrugada del 17 de julio.
Aunque todavía no se ha confirmado la identidad de la víctima públicamente, el caso refuerza una tendencia alarmante en la región: homicidios selectivos cometidos en zonas residenciales, con frecuencia cerca del interior de los hogares. Esta modalidad de violencia crea un fuerte sentimiento de inseguridad en la población.
En las últimas semanas, Santander ha registrado múltiples hechos similares: un joven de 24 años fue asesinado en el barrio Granjas de Provenza, en Bucaramanga, mientras que hace unas semanas otro sicariato cobró la vida de un hombre en la zona entre Bucaramanga y Floridablanca. Esta seguidilla de casos da cuenta de una criminalidad que se traslada de escenarios públicos a entornos privados.
La Policía Metropolitana, según fuentes citadas, refuerza los operativos de inteligencia y patrullajes, aunque los resultados aún no son visibles en materia de capturas. En el caso reciente de la joven asesinada, no se reportan detenidos ni avances divulgados.
Expertos en seguridad señalan que este tipo de homicidios reflejan disputas entre estructuras criminales por control territorial del microtráfico. La impunidad, el acceso fácil a armas y la falta de presencia estatal efectiva agravan la situación.
Los habitantes santandereanos, especialmente mujeres y familias, demandan más presencia policial en barrios vulnerables, sistemas de alerta temprana y acciones interinstitucionales que incluyan justicia rápida y prevención social.
