El Socorro se blinda con café: la cosecha que exige más que manos, exige seguridad
El plan ‘Zona Segura Cafetera’ en El Socorro busca proteger a caficultores durante la cosecha. Aunque la medida es bien recibida, líderes del sector advierten que la seguridad rural no puede ser solo estacional.

Mientras se alistan para recolectar uno de los productos más emblemáticos de Santander, los caficultores del Socorro también se preparan para enfrentar un enemigo silencioso: la inseguridad rural. La iniciativa ‘Zona Segura Cafetera’ busca dar respuesta, pero la pregunta es si alcanza.
Trece fincas de la vereda Árbol Solo, en El Socorro, encendieron una señal de alerta que va más allá del aroma del café recién recolectado. Conscientes de que la temporada de cosecha —entre agosto y diciembre— atrae no solo a recolectores sino también a población flotante y posibles amenazas, lanzaron junto a la Policía de Carabineros de Santander el plan piloto ‘Zona Segura Cafetera’.
Este modelo de vigilancia comunitaria fue diseñado a partir de las preocupaciones expresadas por los propios campesinos. Se establece un canal directo con la Policía, algo que debería ser rutina en cualquier rincón del país, pero que en muchas zonas rurales aún es privilegio.
Aunque las autoridades celebran la iniciativa, los propios líderes del sector caficultor reconocen que no es suficiente. Pedro David Berdugo, secretario de Agricultura del municipio, aseguró que “todo suma”, pero también recordó que desde 2025 se viene pidiendo más presencia institucional rural, incluso fuera de la temporada alta.
Gerónimo Sarmiento, del Comité de Cafeteros, fue más directo: “Las fincas se llenan de trabajadores y no siempre hay condiciones para garantizar seguridad. No podemos dejar sola a la gente en el campo”.
El Socorro es uno de los grandes productores de café de Santander y una cosecha buena depende tanto del clima como de la tranquilidad. Pero si solo nos acordamos del campo en época de recolección, el grano amargo no será solo el del café.